
Los vecinos de Anyelo Santana, en el barrio 21 de enero, asesino de seis personas la tarde del sábado en Higüey, no superan el desconcierto, el dolor y la tristeza.
En ese barrio inició la espeluznante secuela de hechos. Una de las vecinas, que vive cerca de la casa de este, quién no quiso dar su nombre, dijo que se escucharon tres disparos. Ella sostiene que pensó: “Ya pasó una desgracia”. Cuando los vecinos salieron a ver qué sucedió se dieron cuenta de que el hombre había herido a su pareja Ángela María Acosta.
“Cómo a los cinco o seis minutos sonó otro tiro, y pensaron que Anyelo se había suicidado”, aseveró.
Manifestó que cuando todos se estaban aglomerando para entrar a la casa del victimario a sacar la mujer o, a él mismo, es cuando Anyelo sale y comienza a tirar tiros.
Explicó que cuando él salió lo hizo de forma agresiva, y es cuando hiere a dos vecinos, una señora y a un joven en una pierna.
Apuntó que ese comportamiento en él jamás lo habían visto. Hasta ese momento era muy buen vecino, solidario, amable, trabajador, servicial, que en barrio de él nadie tenía quejas. Según narra, a partir de ese momento todo el sector quedó aterrorizado. Los vecinos estaban preocupados por él y la esposa, además, de las otras víctimas que hirió allí, y que no pensaron la situación iba a llegar tan lejos.
Manifestó que después de hacer los tiros, se montó en una camioneta y se fue.
Otro de los vecinos, Miguel Ángel, dijo que escucharon cinco disparos, cuando se encontraba en la sala de su casa jugando con su sobrino.