Cheslie Kryst, quien fue coronada Miss USA en 2019, murió este domingo a los 30 años después de saltar de un edificio en Manhattan, según el Departamento de Policía de la ciudad de Nueva York.
Kryst nació en Charlotte, Carolina del Norte, y a los 28 años fue ganadora del concurso en 2019.
Pero la vida de Kryst no giró alrededor de los concursos de belleza. Ella era una abogada que buscaba ayudar a reformar el sistema de justicia de Estados Unidos y dedicó parte de su tiempo para trabajar en nombre de los presos de forma gratuita.
«Creo que mi trabajo puede ser muy difícil a veces, creo que puede ser frustrante a veces, en especial viendo los tiempos tan lentos de los cambios de la justicia, en especial los cambios que se necesitan hacer, pero me emociona poder hacerlo», le dijo Kryst a CNN en Español en 2019 después haber ganado el concurso.
Trabajó con la abogada Brittany Barnett, quien lidera el proyecto Buried Alive, y se ha dedicado a liberar a personas que están injustamente encarceladas por «leyes draconianas sobre drogas», según la página web de Barnett.
«El poder trabajar con ella ha sido una tremenda experiencia de aprendizaje», dijo Kryst a CNN en Español.