Tras la interrupción por los gritos de “traidor”, secundados por otros asistentes, el exvicepresidente prosiguió su intervención en la conferencia que se celebra en Kissimmee, en el centro de Florida, en la que también participan, entre otros, los senadores republicanos Marco Rubio, Rick Scott, Ted Cruz y Lindsay Graham.
“Soy cristiano, conservador y republicano, por ese orden, y me siento honrado de estar ante ustedes”, dijo Pence a modo de presentación.
El exvicepresidente, de quien Trump se ha distanció después del 6 de enero, hizo un repaso de los logros de la anterior Administración y criticó al demócrata Biden y a su Gobierno.
Según Pence, en los primeros 140 días de la Administración Biden se han “promovido las fronteras abiertas, subido los impuestos, gastado de manera desbocada, recortado fondos a la policía, permitido abortos a la carta, censurado la libre expresión y cancelado nuestras libertades más preciadas”.
“Ha llegado la hora de que cada estadounidense defensor de la fe y la libertad se ponga en pie y haga oír su voz para revertir la agenda de la izquierda radical”, aseguró el exvicepresidente.
En su intervención aludió a las protestas contra el racismo en EE.UU., para decir que “la Policía no pone en peligro las vidas de los afroamericanos, sino que las salva”.
Pence, que en su día calificó la toma del Capitolio como uno de los hechos más oscuros de la historia de EE.UU., no atendió las peticiones de Trump para que detuviera la certificación de la victoria de Biden en el Congreso el 6 de enero, lo que motivó que algunos de los partidarios del entonces presidente pidieran que fuera “ahorcado”.
El exvicepresidente ha dicho públicamente que ha hablado varias veces con Trump después de que asumió Biden, pero también ha reconocido que no está seguro que se vayan a ver de nuevo en persona.
Pence es considerado uno de los políticos republicanos con más posibilidades de ser candidato en las elecciones presidenciales de 2024. Trump no ha despejado aun la incógnita de si aspirará a un segundo mandato. EFE