Se mantiene el despliegue militar por aire y tierra en todo el perímetro fronterizo entre República Dominicana y Haití, por la provincia Dajabón, a fin de dar respuesta a cualquier eventualidad en el vecino país tras el asesinato del presidente Jovenel Moïse y que involucre ese perímetro.
El mayor general Julio Florián Pérez, comandante del Ejército de República Dominicana, garantizó que los 380 kilómetros que ambos países comparten en la isla se encuentran sellados con más de nueve mil guardias del organismo que dirige.
Adicional, el alto oficial dijo que cuentan con varias unidades de la Fuerza Aérea y la Armada Dominicana.
“Además, tenemos todo el equipo de inteligencia trabajando para saber si en algún punto hay alguna vulnerabilidad y poder corregirla”, declaró el mayor general al realizar un recorrido por el área fronteriza de Dajabón.
Florián Pérez estuvo acompañado por las autoridades civiles de esa demarcación.
La gobernadora Rosalba Milagros Peña pidió a la población mantener la calma ante la militarización de esa demarcación. Al mismo tiempo, exhortó a los dominicanos que están radicados en el vecino país para que retornen a su patria.
Recordó que los pasos fronterizos solo estarán abiertos para los ciudadanos que decidan regresar mientras dure el estado de sitio en Haití.
Hasta el mediodía de este jueves, 22 dominicanos habían retornado al país a través del portón fronterizo con Dajabón. Al ser consultados al llegar a territorio nacional, aseguraron a Diario Libre que Haití se mantiene en relativa calma tras el asesinato en la madrugada de ayer del presidente Jovenel Moïse por un comando armado.
Comercio binacional
Con el cierre de la frontera los más perjudicados son los comerciantes, quienes están dejando de percibir varios millones de pesos al día por la falta de mercado.
El intercambio comercial entre dominicanos y haitianos moviliza más de cien millones de pesos al mes, según informó el alcalde de Dajabón, Santiago Riverón.