El Pentágono reveló este jueves que entrenó en el pasado a un ‘número pequeño’ de los ciudadanos colombianos que han sido arrestados por su presunta participación en el asesinato este mes del presidente de Haití, Jovenel Moise.
Un portavoz del Pentágono dijo a Efe que han llegado a esa conclusión después de revisar las ‘bases de datos’ sobre sus operaciones de formación, pero no precisó cuántos de los colombianos arrestados recibieron ese entrenamiento ni en qué consistió el mismo.
‘Una revisión de nuestras bases de datos de entrenamiento indica que un número pequeño de los individuos colombianos detenidos como parte de esta investigación participaron en entrenamientos militares y programas de educación de EE.UU. en el pasado’, afirmó a Efe el portavoz.
El entrenamiento se produjo mientras esos individuos eran ‘miembros activos de las Fuerzas Armadas de Colombia’, añadió en un correo electrónico el vocero, el teniente coronel Ken Hoffman.
El Pentágono sigue investigando el asunto y no tiene más detalles que compartir de momento, subrayó la fuente, quien recordó que del entrenamiento militar de Estados Unidos se benefician de forma rutinaria ‘miles de hombres y mujeres militares de naciones aliadas en Sudamérica, Centroamérica y el Caribe’.
‘Este entrenamiento enfatiza y promueve el respeto por los derechos humanos, el cumplimiento con las normas legales y el carácter subordinado de los militares respecto a los líderes civiles democráticamente elegidos’, recalcó el portavoz.
Según la Policía haitiana, el magnicidio de Moise lo perpetró la semana pasada un comando de 28 personas, de los cuales 26 son de nacionalidad colombiana y otros dos son estadounidenses de origen haitiano.
Al menos 13 de los 18 colombianos detenidos hasta ahora por el ataque son militares retirados de Colombia, mientras que la Policía haitiana busca a otros cinco ciudadanos de ese país que también integraron supuestamente el comando.
La nueva información del Pentágono preocupó al senador demócrata estadounidense Patrick Leahy, impulsor de una ley que lleva su nombre y que busca garantizar que las fuerzas militares extranjeras que reciban ayuda de Washington no hayan estado implicadas en abusos de derechos humanos.
Leahy criticó al Ejército colombiano y aseguró que la noticia ‘demuestra’ que, aunque el entrenamiento del Pentágono busque garantizar el ‘respeto por los derechos humanos’, no puede ignorar los defectos de ‘la propia institución’ que lo recibe.
‘El Ejército colombiano, al que hemos apoyado durante 20 años, tiene una larga historia de convertir a civiles en objetivos, violar las leyes de la guerra y no rendir cuentas. Ha habido un problema cultural dentro de esa institución’, afirmó el veterano senador, citado por el diario The Washington Post.