Un juez de la Oficina de Atención Permanente del distrito judicial de Santiago cambió la medida de coerción, consistente en prisión preventiva, por presentación periódica, impedimento de salida del país y mantenerse alejado de las presuntas víctimas, al director de un centro de rehabilitación, donde alegadamente ocurrían abusos de diferentes tipos contra menores de edad.
El tribunal adoptó la decisión durante la revisión obligatoria de la medida cautelar, impuesta en diciembre del año pasado.
Lorenzo Silverio Almonte o Julián Almonte (El Pastor) es acusado por actos de tortura, maltrato, así como abuso sexual y psicológico en perjuicio de cinco adolescentes.
Se recuerda que especialistas y fiscales de la Unidad de Atención Integral a Víctimas de Violencia de Género, Intrafamiliar y Delitos Sexuales, la fiscalía de Santiago allanó el local de la institución, un centro privado de rehabilitación que estaría enfocado en tratar a adolescentes con problemas de alcoholismo y problemas de conducta.
Las autoridades rescataron del lugar a cinco adolescentes que estaban hacinados y en condiciones deplorables e inhumanas.
Tras las correspondientes evaluaciones físicas y psicológicas, el Ministerio Público determinó que los menores de edad, con edades entre 13 y 17 años, eran violados sexualmente por adultos responsables de su cuidado, obligados a ingerir sustancias psicóticas y medicamentos sin prescripción médica, además de que recibían castigos como dormir en el suelo, amarrados con cadenas y mojados.
La jueza Wendy Tavárez, de Atención Permanente del distrito judicial de Santiago, impuso tres meses de prisión preventiva como medida de coerción al director de un centro de rehabilitación intervenido por el Ministerio Público, donde supuestamente ocurrían abusos de diferentes tipos contra menores de edad.
La magistrada Tavárez también declaró el caso complejo.
Alias El Pastor estaba recluido cumpliendo la sanción en el Centro de Corrección y Rehabilitación Rafey Hombres.
Fuente: Edward Fernández/Diario Libre
